Cualquier aporte mediante energías renovables destinado a cubrir parte o la totalidad de las necesidades energéticas de una vivienda o edificio tiene un efecto notable sobre la calificación energética del mismo, al disminuir la demanda de energía cubierta mediante energías “convencionales” y por lo tanto las emisiones de CO2.
Las demandas energéticas básicas a cubrir son las de producción de agua caliente sanitaria(ACS), la de calefacción y la de refrigeración, además de otras como la iluminación, la ventilación y el funcionamiento de los electrodomésticos.
Para cubrir estas necesidades mediante el aporte de renovables, ponemos a tu disposición nuestro conocimiento en instalación de:
Aerotermia
Energía Aerotérmica 
La aerotermia es la energía térmica contenida en el aire ambiente y se extrae del mismo a través de bombas de calor aerotérmicas. Existe una extensa variedad de equipos, que en función de las aplicaciones se pueden emplear en: Sistemas de climatización de edificios, calefacción y ACS en viviendas e industrias
Geotermia
Energía Geotérmica 
La energía geotérmica se extrae del interior de la tierra por medio de bombas de calor geotérmicas para su uso en procesos de generación térmica como pueden ser: calefacción y refrigeración de viviendas y edificios, producción de Agua Caliente Sanitaria para pequeños y grandes consumos o calentamientos y enfriamientos industriales
Solar Térmica
Energia Solar Térmica
La energía solar térmica es la fuente de energía más limpia del conjunto de las energías renovables. Mediante captadores solares aprovechamos la radiación del sol para transformarla en energía calorífica, que a su vez se puede emplear en numerosos procesos: Sistemas de calefacción, producción de ACS y generaciones de calor en procesos industriales.
Biomasa
Energía Biomasa
La biomasa es la fuente de energía más antigua que conoce el hombre e incluye los combustibles que provienen de las plantas, árboles y residuos forestales. Estos elementos combustibles se pueden tratar artificialmente para conseguir «pellets» o «briquetas» que luego se queman con calderas o estufas para producir calor (calefacción, ACS, vapor, etc.)
La integración de este tipo de instalaciones en una vivienda o edificio tiene un efecto muy positivo en la calificación energética del mismo. El documento que indica el grado de eficiencia de una vivienda en consumo de energía recibe el nombre de Certificado Energético:
Desde 1 de Junio 2013 es obligatoria para todas las propiedades construidas antes de 2007 destinados a la venta o alquiler de tener un certificado de eficiencia energética.
Nuestros técnicos, revisan los elementos que afectan a la eficiencia, elementos ‘envolventes’, como ventanas, puertas, chimeneas, muros, tejados, suelo, paredes, forjados, sistemas de calefacción , refrigeración, iluminación etc., en base a esto se emite un certificado de eficiencia energética que va desde A , más eficiente, a G menos eficiente, que indican las emisiones de carbono por metro cuadrado de la vivienda.
El certificado va acompañado de una serie de recomendaciones de mejora del inmueble dirigidas a optimizar la eficiencia energética , lo que se traduce en un ahorro de consumo y emisiones y por lo tanto reducción de la factura energética.
El arsenal de tecnologías disponibles es amplio, debiendo estudiarse detenidamente cada caso para seleccionar la renovable más indicada, buscando la mejor relación entre el coste que supone la inversión en estas instalaciones y el tiempo que tarda en recuperarse la misma mediante el ahorro que supone en la factura eléctrica o de gas.